El silencio me hizo perder
emociones
que luego tuve que pedir a
gritos:
pasión de amor no me
abandones
en instantes precisos o
imprevistos.
Me encontré devorando tu
anhelada boca,
mis manos inquietas
escrutando a la vez,
descubro tu pecho, la pasión
trastoca
te consienten mis
caricias sin tocar tu tez.
Caricias
que extasían y hurtan la cordura,
que erizan tu piel al
contacto con mis labios;
mis manos hurtaron tu
vientre con locura
ganando hacerte el amor sin agravio.
Así viajaron tus manos por
toda mi estampa
usurpando lo que tus labios
ya conquistaron.
Colinas, cavernas, estrechos
y pampas
en la tempestad de tus manos se encontraron
Sentí mi cuerpo ardiente
adosarse al tuyo
y cerré mis ojos en un suspiro profundo;
cima a sima, nada de mi
cuerpo excluyo
con un río turbulento mi
sentir confundo.
Percibo el aroma de tu piel
desnuda
final de amor que estamos
disfrutando
vaivén de ola seductora que no duda
en reavivar el deseo que
está acabando.
La impetuosa llama no logra
así apagarse
corazones de fuego que
siguen ardiendo,
pasión de amor que obliga a
reencontrarse
a tu piel con mi piel para seguir sintiendo
No hay comentarios:
Publicar un comentario